Problemas y metodología


Todos los días de nuestra vida nos enfrentamos con situaciones que necesitamos resolver mediante un proceso de análisis y toma de decisiones, desde cuestiones tan sencillas cómo: ¿qué ropa vamos a vestir ese día o qué película vamos a ver en el cine?; hasta situaciones más elaboradas cómo: la compra de una  nueva computadora o la organización de nuestro tiempo y actividades para presentar puntualmente un trabajo final en nuestra escuela.

Se puede definir problema cómo una situación, con un grado de dificultad variable, que debe resolverse y que puede tener un número variable de soluciones.


Qué datos tengo disponibles?

  ¿Comprendo todos los conceptos? 

  ¿Puedo plantear el problema de una forma que resulte más familiar?

  ¿Puedo crear un dibujo que ayude a comprender mejor el problema? 

  ¿Qué se requiere para resolver el problema?

  ¿Existen algunas condiciones que dificultan o facilitan la solución del problema?



Metodología: Es el conjunto de procedimientos racionales utilizados para alcanzar el

objetivo.

Luego de comprender el problema y analizar los datos de entrada y de salida que deseamos obtener podemos comenzar a plantear alternativas de solución.  Para llegar a la solución de un problema tenemos a la mano distintos caminos, procederemos entonces al planteamiento de alternativas diversas,  lo que nos permitirá definir los resultados más adecuados. Formulando las siguientes preguntas nos facilitan la tarea:

  ¿Recuerdo algún problema similar?

  ¿Tengo información acerca de cómo se resuelve este tipo de problema?

  ¿Puedo utilizar información?

  ¿Es factible dividir el problema en partes?

  ¿Estoy utilizando todos los datos disponibles?

Elección de una alternativa

Una vez que definimos las alternativas es necesario analizar cada una, en algunos casos quizá sea factible intentar valorar todas las alternativas posibles con el fin de descartar una por una hasta  encontrar la adecuada, pero en problemas más complejos es posible que no podamos darnos ese lujo,  lo indicado entonces es analizar y seleccionar una de las opciones. Formular las siguientes preguntas nos ayudará a elegir:

¿La alternativa seleccionada me llevará al resultado requerido?

  ¿Tengo la información y los recursos suficientes para llevarla a cabo? 

  ¿Cuánto tiempo requiere su aplicación?

  ¿Puedo realizarla de manera autónoma?

  ¿Requiero ayuda?

  ¿Existe una mejor alternativa?


Desarrollo de la solución

Una vez elegida la mejor alternativa procederemos a definir la serie de pasos o acciones que nos llevará a obtener el resultado final. Cada uno de estos pasos debe propiciar las condiciones para ejecutar el siguiente; esto se debe definir desde el planteamiento y la planeación de las acciones a seguir. También, es preciso considerar la información y los recursos necesarios y disponibles para llevar a cabo cada  procedimiento. Finalmente, se requiere definir los tiempos en que  estos se realizarán, considerando cuánto llevará ejecutarlos y la fecha en que se iniciarán; es decir, necesitamos diseñar un cronograma. A lo largo de la fase de desarrollo es importante evaluar si las acciones generan los resultados deseados, de modo que nos permitan avanzar en el proceso. De no ser así, podemos determinar qué está fallando para aplicar las correcciones y ajustes necesarios.

Evaluación

Una vez ejecutadas las acciones, es importante evaluar si logramos el resultado esperado y si se ha resuelto el problema. En esta fase además podemos identificar qué factores determinan el éxito respecto de las acciones o procesos efectuados; es decir, qué funcionó y qué factores representan un obstáculo, lo que deriva en la mejora del proceso. Incluso podemos determinar si la alternativa elegida fue la más adecuada o que otra habría sido mejor.


Metodología se define como el conjunto de acciones que se deben seguir para alcanzar ciertos objetivos previamente teniendo algo de conocimiento sobre el tema.

En informática existen cinco pasos o fases que forman parte de la metodología de solución de problemas:

1. Identificación del problema: Esta es la primera fase de la metodología y consiste en tener una visión muy general de lo que se trata el problema.

2. Planteamiento alternativo de solución: Una vez que se ha comprendido el problema debemos analizarlo y pensar en diferentes formas de resolverlo.

3. Elección de una alternativa: Debemos pensar en la alternativa que más nos convenga, hay que tomar en cuenta las características del problema, las habilidades y recursos con los que contamos.

4. Desarrollo de la solución: Se trata de dar la solución al problema a través de una serie de pasos bien organizados y estructurados.

5. Evaluación de la solución: Este es el último paso de la metodología y consiste en verificar si el resultado es el esperado, si la solución fue la correcta o bien si existe otra forma más sencilla de resolver el problema.